Por egoísmo y por gratitud.

No te lo esperabas, ¿verdad?



Podría decir que lo hago porque soy psicóloga, coach ejecutiva, orientadora educativa y madre con 20 años de experiencia. Pero la verdad es otra.

Lo hago por mí. Porque escribir, escuchar y sostener a otras mujeres me ayuda a no caer (más) en los mismos miedos y túneles de soledad en los que he estado.


Nunca fui “madre nata”. Jamás sentí ese instinto del que todos hablan. Crecí creyendo que, si alguna vez era madre, sería radicalmente diferente… y sí, ¡impossible is nothing!

Cuando me decían “ya te llegará”, yo respondía:

¿y si no?

Y si no, también está bien.


 

Mi vida nunca siguió el guión

Viví sola, defendí a muerte mi carrera, mi libertad, mi idioma propio. Francia, Inglaterra, Ibiza… cambié de piel muchas veces.


No tuve problemas de fertilidad. Solo postergué el momento… hasta que postergar dejó de tener sentido.

Fui madre a los 39.

Y volví a serlo a los 42.


Ahí empieza el juego de contradicciones… y la caída de todas mis certezas.


Ser madre “tardía” es un salto mortal de identidad.

No es solo añadir un rol; es resignificar todos los que ya tenías.


Yo me prometí que mis hijos no irían a la guardería de bebés,

que sería una madre presente aunque eso significara cansancio multiplicado por dos…

y también seguiría creciendo profesionalmente.


El resultado: amor, culpa, cansancio, días de asilo-mar(sic), orgullo, dudas.
Y, al final, reconciliarme con el caos.


 

¿Por qué te cuento esto?

Porque ninguna respuesta sirve para todas.


Aquí caben:

  • quienes retoman su carrera a los 4 meses
  • quienes no pueden soltar ni un segundo
  • quienes aman la maternidad
  • quienes la sobreviven a ratos

Nadie es más madre ni menos madre por eso.

Yo no soy la madre perfecta, 

Tampoco la rebelde.

A veces priorizo estar,

A veces delego, 

A veces fallo más de lo que me gustaría.

Pertenecer también significa no encajar del todo en ningún club.


¿Por qué acompaño a madres +35?

Porque yo también misma voy ajustando mi manera cada día, sin manual.

Sostengo, y a veces caigo.

Resuelvo crisis porque las he vivido.

Y no quiero que ninguna sienta que su historia es pequeña.

Aquí, n ni  “caso perdido” ni “caso de éxito”: seres vida real, con toda la mochila que traemos puesta.


 ¿Mi superpoder profesional? no son los títulos. Es haber visto la vida muy de cerca.

112, Hospitales, empresas, familias, aulas…

He convivido con la vulnerabilidad sin disfraz, he visto miedo y fuerza donde menos lo esperaba.

La prevención emocional, la resiliencia y el humor ácido son mis herramientas favoritas (mucho más que mil likes o teorías perfectas).


¿Cómo lo hago hoy?

  • Creo en cafés largos, conversación real.
  • Microgrupo sobre macrocurso.
  • Tecnología ética cuando suma (sí, incluida mi IA). 
  • Cartas y mails antes que ruido o postureo.

No vengo a prometerte paz universal ni milagros.


Contigo, exploro maneras más vivibles de maternar, trabajar y “no perderte en el intento”.


Hoy acompaño a madres +35 a:  respirar, a volver a su centro y (re)inventar una maternidad sin perderse, ni en la culpa ni en la exigencia.

Vengo a crear contigo una comunidad donde ser “madre tardía” no es raro, ni drama, ni ventaja: es simplemente humano, profundo y caótico.


 

Random facts sobre mí (para que sepas a quién lees):

  • Me cuesta meditar, pero cuando lo hago… me sienta fenomenal.
  • Me encanta la música, y si el tiempo fuera ilimitado dedicaría horas y horas a tocar el clarinete, bajo electrico y piano. 
  • Creo que la salud mental sin moverse es un espejismo (por eso entreno aunque reniegue).
  • Me saqué la secundaría en nocturno mientras curraba, y aprendí más “no queriendo ser profe” que en toda la uni.
  • Mi playlist va de Bach a Arctic Monkeys.
  • Soy valenciana, residente en Ibiza desde el 2013, en el 2014 abrí el 1º espacio de coworking en la isla y soy madre desde el 2022.
  • Hablo 4 idiomas y ninguno perfecto.

  • En mi vida dormía sin despertador y ahora no lo necesito.
  • Mi familia e smi mayor proyecto, plantar tomates el segundo. 
  • El minimalismno y slow living llegaron a mi vida por ellos 🙂

¿Quieres el típico final? Aquí va:


Si alguna vez pensaste “quiero hacerlo a mi manera, pero no sola”, este lugar es tuyo.


Bienvenida a mi historia.

Y a la tuya también.


Únete al reto de calma de 5 días, o quédate solo por las historias. En esta tribu respiramos diferente.

“Si quieres hacerlo a tu manera, pero no sola… este es tu sitio.”